domingo, marzo 16, 2008

Hace muchos años...

...vi por televisión a un grupo de personas, de piel más oscura que la mía, que tenían un cartel delante de sí que decía : Soy persona.
Hoy, cuando frente a mi casa, un señor buscaba en un contenedor algo que le sirviera, pensé: ¿este es el país que tiene en sus manos (¿manos o garras?) 50.000 millones de reserva?, ¿este es el país en el que según declaraciones el presidente aumentó sus ingresos de manera desmesurada, por, ¡¡¡¡ alquileres!!!!?
Sí, esto es lo que tenemos, y si hay personas que se sienten ofendidas por otras como este pobre argentino, deberían pensar que la vida que viven los coloca en el lugar de la basura. Si pueden, echen una mirada al mundo real, no al de los muchachos peronistas, que todos unidos triunfarán, nada más fácil. Pero, recuerden lo que ocurre en algunos sitios, cercanos a uno, a seres humanos que sólo tuvieron la mala suerte de nacer en el lugar equivocado, es decir, nacer pobres.
Para degeneraciones o abuso de drogas, no exageren chicos, que si pasean por la Zona Norte o similar, Sur u Oeste, los "olorcitos" que llegan de la “gente como uno” son sólo un poco más refinados.
Esto es sólo una reflexión acerca de "los de palabra fácil", que para denostar a los pobres tienen público. Pero recuerden a Bertold Brecht, que nos decía que alguien está golpeando a mi puerta, pero como yo no soy... Todos podemos ser, y como va la cosa, seremos.
Si no hay suficiente piedad en esta tierra, nada bueno nos espera..

Noemí Antin

miércoles, marzo 12, 2008

Chau Jorge Guinzburg

A Jorge lo conocí en 1976. El venía a reemplazarme en la agencia de publicidad que yo estaba dejando. Después, ignoro la razón, comenzamos a vernos con cierta frecuencia. Y la frecuencia se hizo mayor a medida que el tiempo transcurría. La relación pasó a nuestras familias, visitándonos en su casa y en la mía.
Nunca olvidaré aquellas tempranas mañanas en que participaba como invitado en su programa "En ayunas", que hacía junto al inolvidable Carlitos Abrevaya.
Allí todo lo improvisábamos en una suerte de micro-reportaje y yo llevaba discos, algunos francamente absurdos y pasados de moda. Pero nos divertíamos como en los tiempos del colegio secundario.
Muchas veces también almorzábamos juntos y él tenía momentos, o tal vez instantes de seriedad para contarme sus infinitos proyectos. Señalo que la mayoría los cumplió, aunque para hacerlo los haya cambiado por otros todavía mejores.
Ahora él acaba de tomar el misterioso tren, que a pesar de todo, debe estar causándole mucha gracia. Porque siendo de los que sabían vivir muy bien la vida, no me extrañaría que también fuera capaz de vivir muy bien su muerte. Esa que lamento tanto.
Chau Jorgito, nos estamos viendo.

lunes, marzo 10, 2008

Comentario sobre mi querida España

"TODO ESTA COMO ERA ENTONCES"

La frase que titula esta nota pertenece al poeta argentino Olegario V. Andrade (1839/1882) me suena en estos momentos marcadamente cervantina. Entiendo que esta sensación pueda parecer caprichosa, y acaso, hasta influenciada por las circunstancias. No lo niego. Pero veremos porque me llega.
Indudablemente tiene que ver con las elecciones y con sus resultados.
En primer lugar, veo al señor Rajoy en los balcones de la calle Génova compartiendo los insultos no tan indirectos y variadas burlas que sus partidarios propinaron a Rodríguez Zapatero una ver terminado el escrutinio. Sin duda son sus buenos alumnos, los mismos que durante cuatro años le vieron insultar a sus adversarios sin respetar personas ni investiduras.
Sin duda NO le vieron hacer propuestas sensatas hasta poco más de un mes antes de la votación. Cuando no, a dedicarse a duplicar o triplicar absurdamente las propuestas del PSOE.
Tal vez de todo este lamentable cuadro me surja el "todo está como era entonces".
Lo que no se encuentra en igual situación es la nueva perspectiva que se abre y de las políticas del partido ganador - comenzando por las alianzas que forje - dependerá que España reafirme la evolución que viene desarrollando durante la última legislatura.
En otro orden, acaso me falte información, pero no he visto en ninguna parte la felicitación de la Casa Real dirigida a Zapatero. Es probable que allí hayan estado ocupados. Habrá que excusarlos.
Y como aclaración final, diré que aunque contra mi voluntad por impedimento generado por las circunstancias no viva en la Península, soy español.
Entre otras cosas, mi mayor anhelo, sería vivir y morir allí. Afortunadamente, mis
dos hijas disfrutan los aires españoles.
Pero lo más importante es que todos miremos hacia adelante para ver la llegada
de un nuevo tiempo que sin dudas será mejor.

Foto: Inma Mesa - PSOE

miércoles, marzo 05, 2008

El ejemplo de Messi

Prácticamente todas las actividades humanas están dominadas por dos fuerzas que suelen actuar en conjunto: el marketing y la publicidad. Esto no es casual. Sirve para que unos pocos ganen mucho dinero.
El deporte -o algo que se le parece mucho- no se ha visto eximido de la regla, y en el fútbol, por ejemplo, la ecuación se hace verdaderamente notoria.
Pero muy de tanto en tanto, observamos contrastes que parecen desvalorizar tanto empeño. Sirva como muestra lo ocurrido después de la jugada que originó la lesión de Leo Messi.
Este jovencito esforzado, venciendo hasta las dificultades originadas en su propio cuerpo, consiguió ser uno más que llegó, entre los miles y miles que a pesar de su empeño no llegarán nunca.
Debido a la desgracia sufrida -física y anímica- la televisión lo mostró llorando, con un llanto que expresaba no sólo dolor sino también frustración. Y no eran las lágrimas de un actor lanzadas en medio de su actuación en un drama. Eran lágrimas genuinas, de esas para las que el marketing y la publicidad no tienen nada que ofrecer. Ni siquiera un pañuelo.

Ante cualquier duda, consulte con su primo

Hace unas pocas semanas, Mariano Rajoy, candidato por el Partido Popular para las próximas elecciones españolas, se refirió en estilo socarrón a los inconveniente provocados por el cambio climático, comentando que ese era un tema que consultaría con su primo, aparentemente, verdadero conocedor del asunto. Además, se burló de los agoreros, agregando que ni siquiera los servicios de pronósticos meteorológicos eran confiables, ignorando u olvidando que en España funcionan de forma bastante precisa.
Pero tardó muy poco en cambiar de posición para intentar convertirse en un verdadero cruzado para dar batalla contra el calentamiento global y los cambios climáticos.
Si proyectamos criterios de tal amplitud y posiciones tan rápidamente cambiantes
-un pequeño botón de muestra- al manejo de su país como gobernante, las conclusiones no pueden ser calificadas sino como desconsoladoras.
Las encuestas, afortunadamente, no lo dan precisamente como ganador. Sólo queda el terror de que puedan equivocarse. Esperemos por el bien de todos: mujeres y hombres, pobres y ricos, enfermos y sanos, jóvenes y pensionados, desocupados y trabajadores, que eso no suceda. Y que resulten tan precisas como el maliciosamente descalificado servicio pronosticador español.